El Grupo Marsans niega que Aerolíneas Argentinas se encuentre en suspensión de pagos

"La empresa en estos momentos está en una crisis económica muy seria: no tiene repuestos, no tiene posibilidades de pago, está en "default" (cese de pagos), no le paga a ninguno de los proveedores", aseguró Pérez Tamayo, en declaraciones a la emisora local Radio América. Al respecto, un portavoz del grupo español, dueño de la aerolínea argentina, afirmó que las acusaciones que ha vertido Pérez Tamayo es una forma de "sabotear a la compañía, a la vez que un intento de que esta vuelva a ser pública", expresando así el sentir de varios analistas del sector que consideran que tras la intransigente posición de los pilotos al negarse a negociar un pacto social que posibilite la paz en la aerolínea, se esconde el interés de determinados sectores políticos de que el Gobierno argentino, que posee el 5% de la aerolínea, recupere nuevamente su control. "Actualmente estamos negociando un diálogo social con los sindicatos y el Gobierno, tras los graves problemas que ha tenido la compañía con las huelgas feroces que se han registrado en los últimos meses y que han costado a la empresa cerca de 215 millones de dólares (unos 151 millones de euros)", añadió el portavoz. Pérez Tamayo reclamó en sus declaraciones una "gestión en serio, clara y concisa que entienda el negocio aeronáutico" para Aerolíneas, y aludió a la preocupación de la presidenta argentina, Cristina Fernández de Kirchner, que "está tan alarmada o más que nosotros", afirmó. Marsans niega la crisis Marsans niega que exista una crisis y argumenta este parecer recordando la inversión que el grupo ha hecho en la compra de aviones, entre ellos cuatro Airbus A380, de los que dos se van a destinar a Aerolíneas Argentinas. "Tan sólo se trata de mantener abierto un conflicto por el rechazo de unas cuantas personas que quieren una situación anterior que no es deseada por el Gobierno argentino", afirmó el portavoz de Marsans y agregó que se trata de "declaraciones interesadas de una persona que parece tenernos un odio visceral, y que busca enconar la situación para sacar un beneficio particular". Marsans destacó que el Gobierno argentino está contento con la actuación del grupo español, que además cuenta con la línea aérea Air Comet, que mantiene también vuelos al cono sur, y que cuenta con su apoyo para solucionar los conflictos habidos y alcanzar un acuerdo de "paz social". Es un acuerdo difícil de lograr mientras los pilotos mantengan una posición tan radical en su oposición a Marsans, la que les lleva a realizar constantes acciones de fuerza, como la suspensión injustificada de vuelos. El nuevo capítulo en la polémica entre los pilotos y Aerolíneas Argentinas se produce, paradójicamente, en la semana en que tanto el Gobierno como Marsans esperaban lograr la tan necesaria paz social, que es el requisito que el grupo español pide para realizar las inversiones a las que se ha comprometido para ampliar y renovar la flota, requisito que no le ha impedido, sin embargo, entregar la pasada semana a la aerolínea el primero de los cuatro Airbus A380 que ha comprado. José Antonio Tamargo (transportes@hosteltur.com)