Brexit: empresas rehúsan los tribunales británicos

El Brexit trae consigo otra consecuencia en el ámbito contractual corporativo y es que numerosas empresas están modificando sus contratos para que la resolución de conflictos surgidos de los mismos se ventilen en el marco de la Unión Europea y no en el Reino Unido.

Así, desde la importante decisión del Reino Unido de dejar de formar parte de la UE, varias empresas británicas que tienen en sus contratos uno o varios elemento/s internacional/es han cambiado las cláusulas de resolución de litigios en sus contratos y han optado por que los otros tribunales de la UE se pronuncien sobre los litigios en lugar de los del Reino Unido, esto es, renuncian a su fuero propio.

Asimismo, hay sociedades que han advertido que seguirán por la misma senda si no se producen avances significativos en las negociaciones antes de marzo de 2019, sobre el futuro régimen que se aplicará después de Brexit, para el reconocimiento mutuo de las sentencias judiciales.

Esto se produce en un momento en que los tribunales ingleses se han vuelto cada vez más internacionales y que contemplan litigantes de todo el mundo. De hecho, entre los años 2017 y 2018 más del 50% de los procesos judiciales de los juzgados de lo mercantil han involucrado a litigantes de fuera del Reino Unido.

El ordenamiento jurídico inglés, con sus peculiaridades, y las profesiones relacionadas con el mundo jurídico son uno principales contribuyentes a la economía británica y la predilección del derecho inglés y de los tribunales del país ha sido durante mucho tiempo la preferencia por los acuerdos comerciales internacionales.

A pesar de lo anterior, por cuestiones de viabilidad y practicidad, lo más probable es que los cambios de las cláusulas contractuales se realicen más en contratos futuros que en los ya existentes, sobre todo porque las empresas quieren claridad sobre sus acuerdos comerciales para el futuro.

Luisa González

Abogada