Talgo y Renfe: aumenta la tensión a cuenta de los Avril

Empezaba diciembre con la reclamación de Renfe a Talgo de 116 millones de euros por el retraso de dos años y medio en la entrega de los trenes de la serie S-106, conocidos como Avril. Unos días después, Talgo comunicaba a la Comisión Nacional de Mercados y Valores, CNMV, haber recibido la reclamación de la penalización.

No obstante, en el mismo comunicado, Talgo considera esa medida como improcedente, algo que ya ha comunicado a Renfe, con la aportación, a su vez, de "nuevos argumentos y justificaciones que refuerzan la validez y suficiencia de las razones previamente presentadas".

Como ya informó Hosteltur, la situación entre Renfe y Talgo apunta a que terminará en los tribunales. Por lo pronto, la operadora pública ha retenido la factura de 6 millones de euros correspondiente al mes de diciembre, de un total de 120 millones, que podría suponer, de facto, la ejecución de la sanción impuesta al fabricante de trenes.

Talgo considera la penalización de Renfe "improcedente". Fuente: Talgo

Las multas que quedan por venir

La primera sanción a Talgo de 116 millones no es la única a la que se va a enfrentar en los próximos meses. Tras el incumplimiento en la entrega de los Avril, la operadora pública anunciaba la mencionada sanción y, además, otra que asciende a 50 millones de euros en concepto de "lucro cesante", ya que los retrasos en las entregas de los Talgo S106 obligaron a la operadora estatal a reorganizar parte de sus servicios, justo cuando iba a lanzar la línea de Alta Velocidad a Galicia y Asturias.

Renfe también ha planteado interponer sanciones a Talgo por el caos del verano derivado de las averías de los Avril. Fuente: Archivo Hosteltur

Asimismo, el caos de este verano con varias averías e incidencias precisamente con los trenes Avril como protagonistas, colmaron la paciencia de Renfe, que anunció que interpondría todas las acciones judiciales necesarias para el "resarcimiento de daños y perjuicios a Renfe reservándose el derecho de iniciar tantas actuaciones como sean necesarias contra el grupo Talgo para defender sus derechos, su reputación y los derechos de sus usuarios".

Talgo, a la espera de esclarecer su futuro

Renfe avanzaba la sanción de los 116 millones a Talgo cuando el fabricante de trenes estaba inmerso en la opa lanzada por el consorcio húngaro Ganz Mavag, una operación que, desde el principio, no contó con el respaldo del Gobierno, algo que posteriormente se materializó declinando su aprobación a finales de verano.

Unas semanas después entraba en acción el grupo siderúrgico Sidenor, al presentar Talgo una manifestación de interés a la CNMV de la compañía vasca para presentar una opa que podría llegar a alcanzar el 100% del capital del fabricante de trenes. Una operación que, esta vez sí, cuenta con el visto bueno tanto del Ejecutivo central como el del País Vasco.

Sin embargo, la sanción de Renfe podría enturbiar el desenlace de lo que se considera ya una partida de ajedrez. El grupo presentó en noviembre una oferta a Trilantic, principal inversor de Talgo, una oferta de 148 millones para adquirir su participación del 29,9% en Talgo. Una oferta de 4 euros por acción que se rechazó, aunque más tarde, según recogen distintos medios, se abrió a aceptar 4,75 euros. Una nueva oferta que queda por debajo de los cinco ofrecidos por el consorcio húngaro.

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